YO DIGO SÍ A LA PAZ

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viernes, 11 de julio de 2014

TITULARES, PERIODISMO Y DERROTAS EN EL MUNDIAL

Por Germán Ayala Osorio, comunicador social y politólogo

Lo que suceda dentro de las actividades de un evento deportivo orbital como un Mundial de Fútbol[1] no solo sirve para reconfirmar a esa disciplina como un deporte espectáculo, sino para reconocer al periodismo deportivo y al periodismo en general, como un actor fundamental para la divulgación y la consolidación de ese gran negocio que se llama Mundial y de ese poderoso gestor-patrón llamado FIFA.

Dedicaré estas líneas a los tratamientos periodístico-noticiosos que medios de la prensa escrita del Brasil y un medio colombiano[2] dieron a dos hechos futbolísticos: de un lado, la abultada derrota que la selección de Brasil sufrió en su juego contra su similar de Alemania (7 a 1); y del otro, la eliminación de la selección de Colombia, que cayó ante el seleccionado local 2 a 1, con una actuación del árbitro central que para muchos incidió en el resultado, lo que al final significó, a decir de muchos, la salida del Mundial del combinado nacional. Haré, de igual manera, referencia a un titular del Diario del Magdalena HOY, con el que se registró de manera ‘particular’ la derrota del Brasil. Esta mención se hará al final del artículo.

Señalo que el periodismo, como oficio, no sólo tiene un carácter histórico  que le permite registrar los hechos y aportar a la consolidación de la historia oficial, sino que termina juzgando los hechos y sus protagonistas en un ejercicio claro de violencia simbólica a través de una amparada y mimetizada subjetividad. Y para ello apela al lenguaje periodístico-noticioso, que por antonomasia responde a dicotomías con una fuerte carga moralizante.

En específico haré referencia a los titulares con los que la prensa brasilera y colombiana (un medio en particular) registraron tanto la histórica derrota de la selección local, como la eliminación de la semifinal del equipo colombiano.

Para el caso del Brasil hay que decir que el fútbol en ese país se siente y se vive con pasión religiosa. A pesar de las protestas sociales que levantó la costosa organización del Mundial Brasil 2014, dicho deporte atraviesa  la vida de los brasileros y para muchos la justifica.  El fútbol para los brasileros es, al tiempo, religión, opio, fiesta, pero también tragedia. En especial porque las derrotas se asumen siempre como poco probables debido a la naturalizada calidad del jugador brasilero y de sus equipos; de igual manera, se tornan inexplicables cuando aparecen, e inaceptables, cuando éstas se presentan dentro del territorio nacional, como el caso del ‘Maracanazo[3]’ y del reciente ‘Mineirazo[4]’. En ese delicado contexto psicosocial inscribo los efectos que puedan producir los titulares con los que la prensa escrita del Brasil registró, evaluó y calificó la derrota 7 a 1 frente a la selección de Alemania.

Titulares[5] como ‘Vergüenza’, ‘Humillación’, ‘Tragedia Histórica’ y ‘Peor que el Maracanazo’ dan cuenta de un ejercicio periodístico con el que la derrota, deportivamente posible, terminara convertida en un verdadero desastre, en una verdadera tragedia nacional. Dicho titulares pueden contribuir de manera negativa en las conductas de los aficionados (lectores/audiencias) que sintieron dolor por lo acontecido en el campo de juego. Y claro, para aquellos que  en el silencio soportaron la humillación deportiva que significó el 7 a 1 en la semifinal.  Los efectos de los duros señalamientos de la prensa que calificaba con fuertes epítetos lo sucedido, aún están por medirse.




No se trata de desconocer el valor periodístico-noticioso del histórico hecho deportivo que se concentra y se expresa en la derrota 7 a 1, sino de discutir si pudo haber lugar para otros titulares. Por ejemplo, propongo los siguientes: ‘No pudimos avanzar’, con el que se soslayaría la derrota y se minimizaría el ‘dolor’ en los seguidores de la selección brasilera; ‘perdimos y de qué manera’, con el se reconocería la abultada derrota, pero no se calificaría como una humillación; Alemania, superior, con este quizás se ayude a que la gente comprenda que Brasil no es invencible y por esa vía reconocer la superioridad de quien los derrotó de manera justa, desde el punto de vista deportivo; o ‘Inobjetable derrota’, titular con el que de igual forma se pretende cerrar el paso a la dramatización de un resultado deportivo, a través del reconocimiento de la superioridad del otro.

Quizás estas propuestas de titulares no den cuenta realmente del dolor y el sufrimiento de ese pueblo que sintió la derrota deportiva, pero sin duda, minimizan el sentido violento que acompaña a los titulares con los que la prensa del Brasil registró, evaluó y calificó la derrota del combinado brasilero.

¿Cuáles titulares recogen con mayor exactitud lo sucedido en el campo de juego? ¿Era inevitable titular de esa manera un resultado deportivo,  histórico si, pero inesperado para los brasileros, pero posible dentro de la lógica de un juego como el fútbol? ¿Qué buscaba el periodismo deportivo del Brasil, ahondar en el dolor y en la rabia colectiva?

Quizás estas y otras preguntas se queden sin respuesta, pero lo cierto es que los titulares cumplieron con la tarea de agrandar y sobre dimensionar un hecho deportivo socialmente doloroso y desmedido, pero deportivamente probable dentro de la lógica de un juego en el que los goles aparecen por  la virtud de quien los hace, o por los errores de aquellos que los deben evitar.

Estamos ante un ejercicio claro de violencia simbólica y el juzgamiento periodístico de un hecho deportivo. Parece ser que el periodismo deportivo tiene mayor  licencia para opinar, evaluar y calificar los hechos, si se compara con el periodismo político, económico y judicial. En estas modalidades suele apelarse a fuentes o a terceros para evaluar un hecho noticioso. Son las frases de militares, presidentes y otras figuras públicas las que terminan recogiendo las opiniones y los pareceres de los periodistas.

Quizás, entonces, el periodismo deportivo esté más cerca de las subjetividades de los periodistas que suelen ser hinchas o admiradores de un equipo o de la selección nacional, lo que termina convirtiéndose en una especie de licencia periodística para calificar y si es el caso, ensañarse con los protagonistas y responsables de un hecho deportivo que tiene la particularidad de concentrar aspiraciones, sueños, sentimientos y ejercicios representacionales de una masa no siempre preparada para manejar las derrotas deportivas en una disciplina en la que claramente está  depositada la búsqueda y el sentido de la felicidad de grandes mayorías.

Ahora miremos el caso del titular de un diario colombiano. En este caso se trata de un titular que eliminó la perspectiva periodística con la que es posible mirar el hecho deportivo (la eliminación de Colombia del Mundial), y dio vida a una perspectiva noticiosa que devino panfletaria y vulgar.

Empecemos por observar la imagen:




Sin duda, estamos ante un vulgar ejercicio periodístico, con el que claramente la perspectiva periodística se vio afectada y de esta manera dio paso a una perspectiva auto noticiosa en la medida en que convirtió en noticia el titular de un periódico local en Colombia. Es decir, con el titular el medio se convirtió en noticia y olvidó que su tarea es registrar los hechos, mas no ser protagonista de la historia. El juzgamiento desmedido y panfletario que hizo el Diario del Magdalena Hoy intenta recoger la molestia, al parecer colectiva, que generó la eliminación de la Selección Colombia de la semifinal del Mundial de Fútbol. Y lo hace, desestimando las razones, las circunstancias y los argumentos  deportivos que aparecieron durante el partido Colombia- Brasil, con los que claramente la selección colombiana fue derrotada en franca lid, a pesar, eso sí, de un mal arbitraje. Ahora bien, si la derrota de Colombia estuviera directamente relacionada con las decisiones arbitrales, ello no justifica un titular con una alta carga de violencia simbólica que infortunadamente se verbalizó con el uso particular de una frase de uso común en España, en contextos de crispación. No se debe entender que todos los españoles hablan así. 

Además, el titular insiste en recordar la nacionalidad del árbitro, circunstancia que de manera inevitable hace posible que los lectores en Colombia conecten, con sentido histórico, con la llegada de los españoles a América y las subsiguientes interpretaciones alrededor de si se trató de un descubrimiento o de un avasallamiento cultural.

Estamos, entonces, ante un desafortunado tratamiento periodístico a través de un ejercicio de titulación que desborda parámetros éticos, periodísticos, noticiosos e informativos, y le permite al editor y al periodista que tituló la nota, entrar en los terrenos del panfleto, de la patanería y la vulgaridad, con la clara intención de legitimarlas a través de la libertad de prensa que cobija el trabajo periodístico. Sn duda, una exageración y un mal ejemplo.

Líneas atrás señalé que al final del artículo haría alusión al titular que el mismo Diario del Magdalena HOY, publicó en torno a la derrota 7 a 1 de Brasil ante Alemania. Simplemente diré que es escatológico y ramplón, en el contexto de una sociedad machista.











[1] Parece que no hubiera necesidad de señalar que se trata de un Mundial de Fútbol de Hombres en la categoría de Mayores.
[2] Hoy, diario del Magdalena.
[3] Hace referencia a la derrota sufrida por Brasil 2 a 1 al enfrentar en la final a la selección de Uruguay. Mundial de 1950 organizado por Brasil.
[4] Muy seguramente tomará fuerza este nombre para recodar la derrota 7 a 1. Lleva el nombre del estadio en dónde se jugó el partido Brasil-Alemania.
[5] Las imágenes fueron tomadas de esta URL: https://www.google.com.co/search?q=titulaes+de+la+prensa+de+brasil+tras+derrota+7+a+1&espv=2&tbm=isch&imgil=UUKVEDzUqT1QuM%253A%253Bhttps%253A%252F%252Fencrypted-tbn1.gstatic.com%252Fimages%253Fq%253Dtbn%253AANd9GcR0qHX7wpQswWU1cpiNuzidBDpK_z-sVU4xzQ9dZqcD1s5YtXBsug%253B478%253B324%253BQcVZGE4Ltm_huM%253Bhttp%25253A%25252F%25252Flaaficion.milenio.com%25252Fla_aficion_mundial%25252FMundial_Brasil_2014-Mexico_Brasil_2014-Brasil_2014-Mundial_2014-Mundial_de_Brasil_0_332366824.html&source=iu&usg=__PFAdazj4WH_Yvf5h50cdqVItzo4%3D&sa=X&ei=yNC_U9KhCcussASN5IEQ&ved=0CE8Q9QEwCg&biw=987&bih=638#facrc=_&imgrc=UUKVEDzUqT1QuM%253A%3BQcVZGE4Ltm_huM%3Bhttp%253A%252F%252Flaaficion.milenio.com%252Fla_aficion_mundial%252FBrasil-prensa-derrota_de_Brasil-Mundial_de_Brasil_MILIMA20140709_0084_8.jpg%3Bhttp%253A%252F%252Flaaficion.milenio.com%252Fla_aficion_mundial%252FMundial_Brasil_2014-Mexico_Brasil_2014-Brasil_2014-Mundial_2014-Mundial_de_Brasil_0_332366824.html%3B478%3B324
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[3] Hace referencia a la derrota sufrida por Brasil 2 a 1 al enfrentar en la final a la selección de Uruguay. Mundial de 1950 organizado por Brasil.
[4] Muy seguramente tomará fuerza este nombre para recodar la derrota 7 a 1. Lleva el nombre del estadio en dónde se jugó el partido Brasil-Alemania.

[5] Las imágenes fueron tomadas de esta URL: https://www.google.com.co/search?q=titulaes+de+la+prensa+de+brasil+tras+derrota+7+a+1&espv=2&tbm=isch&imgil=UUKVEDzUqT1QuM%253A%253Bhttps%253A%252F%252Fencrypted-tbn1.gstatic.com%252Fimages%253Fq%253Dtbn%253AANd9GcR0qHX7wpQswWU1cpiNuzidBDpK_z-sVU4xzQ9dZqcD1s5YtXBsug%253B478%253B324%253BQcVZGE4Ltm_huM%253Bhttp%25253A%25252F%25252Flaaficion.milenio.com%25252Fla_aficion_mundial%25252FMundial_Brasil_2014-Mexico_Brasil_2014-Brasil_2014-Mundial_2014-Mundial_de_Brasil_0_332366824.html&source=iu&usg=__PFAdazj4WH_Yvf5h50cdqVItzo4%3D&sa=X&ei=yNC_U9KhCcussASN5IEQ&ved=0CE8Q9QEwCg&biw=987&bih=638#facrc=_&imgrc=UUKVEDzUqT1QuM%253A%3BQcVZGE4Ltm_huM%3Bhttp%253A%252F%252Flaaficion.milenio.com%252Fla_aficion_mundial%252FBrasil-prensa-derrota_de_Brasil-Mundial_de_Brasil_MILIMA20140709_0084_8.jpg%3Bhttp%253A%252F%252Flaaficion.milenio.com%252Fla_aficion_mundial%252FMundial_Brasil_2014-Mexico_Brasil_2014-Brasil_2014-Mundial_2014-Mundial_de_Brasil_0_332366824.html%3B478%3B324

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